Nostradamus me hace los mandados

Mientras unos presumen (o presumirán) que le atinaron a los finalistas antes de la liguilla… su blog que no siempre está, pero de todos modos aparece, y personal mas especificamente, desde… JULIO.

A las pruebas me remito:

Post aquí y en Sobredosis Futbolera

Además atentos a otras partes del post, o sea, soy un vidente 😛

Así que atentos al pronóstico del próximo torneo, que aquí están las de ganar 😛

noche de goles y horrores…

en un muy buen partido de futbol llevado a cabo la noche del sábado en el estadio Jalisco, se enfrentaron los Rojinegros del Atlas contra los… ehm… que son?… bueno, la «máquina» del Cruz Azul.

el partido pintaba bien desde los primeros minutos, donde ambos equipos salieron con todo a buscar el resultado, y donde quedaba evidente que el que pudiera capitalizar los errores del rival se llevaría el partido, y como para demostrarlo, el «tabla» empezaba a tener salidas un tanto precipitadas que ponían de nervios a más de uno.

sin embargo, gracias a una enorme jugada del «Fredy» Sanchez, que dejó viendo visiones a dos jugadores azules, le puso más de medio gol al «corea» Bogado quien sólo tuvo que empujar el balón al fondo de las redes. El detalle curioso en este gol, fué como todo el equipo se fué sobre el «Fredy» para el festejo, reconociendole la gran jugada que hizo. En este momento toda la afición se ilusionaba y parecía que se podía llevar un buen resultado.

cuando parecía que Atlas podía llevarse la ventaja al medio tiempo, la primera gran falla de la noche de el «tabla» cambió la historia. Parecía un tiro de rutina, con un tiro de Edgar Andrade que llevaba fuerza más no colocación, que fué mal atacado por el arquero y el balón terminó escurriendose lentamente hacia dentro de la portería. Esta acción despertó a unos rojinegros que volvieron a intentar ir al frente, pero la mitad del encuentro llegó mostrando un 1-1 que se veía totalmente justo, y que dejaba como resultado la primera baja del encuentro con Vargas lesionado después de una jugada fuerte con un defensor azul.

para la segunda parte, el Atlas se volcó al frente buscando el gol de la ventaja, pero llegó la segunda lesión de la noche, cuando Bogado tuvo que salir luego de un fuerte golpe en el tobillo producto de una patada. El relevo fué Mauricio Romero, quien se despachó con el mejor gol de su carrera con una chilena impresionante, y que por poco hace que se caiga el estadio con la emoción generada en la tribuna. Hasta los aficionados celestes no tuvieron más remedio que aplaudir.

Después del gol, todo parecía encaminarse a una victoria rojinegra, pero un tiro al travesaño de Botinelli, y una jugada totalmente desperdiciada por parte de Mendivil no hicieron más que mantener la moral azul por lo alto, y después de una pésima salida del «tabla» cuando el balón estaba controlado, agarraron mal parada a la zaga rojinegra y caía el gol del empate. Apenas un par de minutos después, los zorros recibirían su tercera baja del juego, cuando Botinelli salió expulsado al recibir segunda amarilla por fingir una falta.

Esto fué el principio del fin para el equipo local, pues cayó en una desconcentración total, y terminó aceptando el tercer gol en contra cuando en otra mala salida del tabla, recibió un gol por el poste que se supone debería de estar marcando. El último gol, para acabar con toda la esperanza rojinegra, llegó en un tiro de esquina, en el que nuevamente el arquero atacó mal el balón, y este se le escurrió entre las piernas para generar que aparecieran como por arte de magia las banderas azules que antes si acaso se habían asomado en la tribuna.

el arbitraje en general no me gustó, no influyó directamente en el marcador, pero tuvo varios detallitos que no me convencieron… por ejemplo, la mayor parte de las jugadas divididas las marcaba a favor de los azules, siendo que para las lesiones de Vargas y Bogado ni siquiera faltas se marcaron. Dejó baratas las amarillas para los jugadores rojinegros, y en una jugada en la que Villaluz correteó como 40 metros al «Pechus» luego que éste le hiciera la faena en zona defensiva, sólo para golpearlo, y se fué simplemente con la amarilla. la jugada más polémica, cuando hacia el final del primer tiempo el balón salió por línea final para tiro de esquina a favor del Atlas y que sorpresivamente no dejó cobrar para terminar la primera mitad. La expulsión de Botinelli fué «justa», porque el jugador fingió la falta y se ganaba correctamente la segunda amarilla, pero queda la duda de cuando fué que recibió la primera, y la causa por la que se le mostró.

en fin, una noche que dejó a la fiel triste, pero con la certeza de sólo fué una mala noche, y que se puede esperar mucho más del equipo en las jornadas venideras

Villaluz, ¿Una promesa mexicana?

El sabado tuvo accion el estadio Azul, donde se enfrentaron Cruz Azul y Veracruz; donde el primero gano por la unica diferencia de acertar una jugada, en un partido que dejo mucho que desear.

 Veracruz llego a encerrarce, con poca ofensiva y muy mala punteria, parecia que solo venian por el empate, el tecnico Miguel Herrera solo buscaba mantener el cero en su arco y lograr un contragolpe, pero su cuadro se vio mal.

Las pocas oportunidades que tuvo Veracruz las desperdicio infantilmente, el «Pony» Ruiz fallo una oportunidad clara de gol, y un remate de Omar Briseño pego en el poste; en resumen una mala tarde y mala suerte para el equipo jarocho.

Cruz Azul tampoco jugo muy bien, las oportunidades no siempre culminaban; y cuando tenian todo para marcar, la punteria no fue la mejor; fue un partido donde las pocas oportunidades se desperdiciaban y solo quedaban en eso, intentos.

Fue hasta el minuto 64 cuando la joven promesa hizo el unico tanto del partido, la unica buena jugada colectiva que el seleccionado solo tuvo que empujar para llevarse los tres puntos, y hundir mas al Veracruz en la porcentual.

 Pero Villaluz tampoco tuvo el gran juego, estuvo lento y ausente en lapsos del partido, como si su mente estuviera en otro lado, talvez pensando en la seleccion Sub-23.

Ojala y esta joven promesa aprenda tambien a ubicarse en el espacio y tiempo, no puedes ser el futuro cuando ni siquiera estas en el presente.

Nosotros tenemos al «Rey del Cemento»

Tigres 1 – Cruz Azul 0

Después de un primer partido prometedor de visitantes, donde la escuadra auriazul logro un valioso empate en tierras potosinas, era tiempo de ver la propuesta felina de local, ante su publico. Vimos que el equipo tenia respuestas al momento de reaccionar ante un marcador adverso (pero más que nada inesperado), y era el momento de ver cual sería la forma de plantarse en la cancha en su propio estadio, donde la obligación es mayor. Proponer, gustar, y sobre todo, ganar.

Ante un estadio lleno desde días antes (con eso de los abonados), los Tigres saltaron a la cancha del Universitario con pocas sorpresas en cuanto al cuadro presentado frente al San Luis. El único cambio fue obligado, ya que antes del partido, Gastón Fernández presento una contractura muscular que le impidió ser convocado para el partido. El Kikin tendría otra oportunidad para enfrentarse a esta dura afición felina que es muy exigente con quien porta la camiseta de la institución.

El resumen del partido lo pudieron apreciar en los noticieros deportivos. Tigres dominó el primer tiempo de pies a cabeza. Cruz Azul desdibujado, ausente de piezas claves que le dan esa profundidad y creatividad que poco a poco le han ido despojando a ese equipo de los denominados “grandes” dentro de nuestro fútbol.

¿Qué vi en este partido? Vi muchas situaciones, algunas agradables, pero algunas otras que me preocupan, aunque se está a tiempo y espero que este en los planes corregir tales asuntos que por lo menos yo veo. Primero que nada lo bueno. Hay ganas, hay deseo, hay ambición. Y eso en éste equipo está para destacarse, ya que era el ingrediente que siempre faltaba. Las excusas sobraban. Ahora parece que se quedaron en el vestidor y eso es bueno. En lo colectivo, me gusta que Tigres ahora presenta variantes ofensivas. Tan te puede jugar el balón a ras de suelo como buscar los trazos largos con algo muy importante, IDEA. Y así nace el gol, con una jugada que los comentaristas de Televisa habían notado. Mario Ruiz tiraba el balón al Kikin, que hacia las funciones de poste, y la bajaba para que alguien llegara de atrás y condujera el balón. Dirán, ¿si ese es el plan, porque corren al Loco, si es mucho mejor poste? Pues si, pero el Kikin por lo menos en estos momentos esta dando mas cosas que el Loco no podía, conducción, retención, y aparte de momento esta cumpliendo con la función que tenia el Loco, que era jugar por arriba. Incluso Tuvo una de gol de cabeza, pero el centro le quedó muy arriba y la coloco en el poste. Bien por el Kikin.

Marino ganó su segunda batalle en la guerra por obtener el cariño de la afición, pero más que nada, esta ganando sus batallas personales, ya que esta demostrando que si es buen jugador. Le sigue faltando, pero ahora se nota que le esta poniendo huevos. Y por eso se le aplaude. Consigue el gol de la victoria, y en general sigue dando buenos partidos. El hecho de que el equipo no depende solo de él le sirve, juegan con libertad, sobre todo porque los caza-piernas están buscando otras, y no las de él, y eso le permite desahogar el juego perfectamente.

Al que están cazando es a la sensación de este plantel. Lucas Lobos en dos partidos ya esta llamando la atención de la prensa nacional. En cuanto al partido, a Torrado lo trajo de pareja de baile. Lastima que Gerardo nunca le tomó el ritmo y se tuvo que ir antes del partido. Si bien hay duda de su segunda tarjeta, tarde que temprano se iba a ir, de eso no me queda ninguna duda. Y les perdonaron tarjetas a otros, como a Huiqui. Lo que más me gusta, aparte de su desequilibrio, es que lo hace por las bandas también, lo que le da mas variantes y zonas por donde atacar, a diferencia de Gaitan, que si no era en el centro no hacia mucho. Lobos en plan grande, solo esperemos que nos dure sin que antes lo maten a patadas.

La zaga sigue siendo el bastión del resultado. Aun le faltan detalles, pero con Cubero se vieron seguros. Hubo desatenciones, claro, pero se siente el coraje de los jugadores por impedir que algo llegue a su arco. No son perfectos, pero mientras sigan colgando ceros en el marcador, los detalles se podrán arreglar en la siguiente semana.

¿Lo que me preocupa? Que este equipo de momento es de 45 minutos, y anotando un solo gol por partido, eso se volverá una preocupación constante. Eso ya lo vivieron los de enfrente (para futuras referencias, los de “enfrente” serán los Rayados) con Miguel Herrera, a quien su equipo solo le rendía medio tiempo y pues ya sabemos a donde lo llevo eso. Una de dos, o metemos mas goles, o jugamos a 90 minutos, porque de lo contrario, cualquier equipo con verdadero oficio nos va a sacar el resultado.

Si de salvarnos se trata, vamos por buen camino, y por primera vez, se vislumbra una pequeña luz en el horizonte. Siempre y cuando atrás el mar siga oliendo a tiburón podrido.

(foto: elnorte.com)